14 sept 2013

Capítulo 56

Mis pies parecían de plomo al intentar bajar las interminables escaleras. La cabeza me dolía desde la estúpida pelea con Louis y no había pastilla que funcionara para detenerlo.
-Fiona apurte que las galletitas ya están casi listas- Me incitó Matt, estaba en casa para hacerme compañía ya que la abuela tenía un desayuno con amigas.
-Ya voy, ya voy- Salte el ultimo escalón que quedaba y aterrice en el piso provocando que el dolor se intensificara. Busque estabilidad en el respaldo de la escalera y camine como si nada hubiera pasado a la cocina.
El olor a masitas de chocolate que la abuela Lynn había dejado en el horno antes de irse, me recibió al abrir la puerta.
Matt estaba intentando sacarlas del horno con una manopla floreada.
-¿Te ayudo?- Ofrecí.
El chico se sobresaltó antes de responder- No, gracias, ya casi esta.
Me encogí de hombros y tomé asiento en una de las sillas alrededor de la mesita decorada con mantel también floreado. A la abuela Lynn le gustan mucho las flores, tanto que había por toda la casa floreros llenos de las mismas.
Con cuidado Matt fue sacando la bandeja del horno y la deposito sobre la mesada de la cocina.
-Está caliente- Afirmo mientras  sacudía la mano donde antes había estado la manopla.
-¿Puedo comer una?
-Están un poco calientes ahora- Me advirtió.
-Está bien, voy a preparar el café mientras se enfrían- Me puse de pie nuevamente y me dirigí a la cafetera para comenzar a preparar el café. Pude notar como Matt tomaba asiento y miraba por la ventana con la vista perdida en algo que ocurría fuera. Me mordí el labio pensando si era correcto abordarlo con el tema ´ ¿Por qué Louis desconfía tanto de vos?’ A esta hora de la mañana pero ciertamente el remordimiento me estaba carcomiendo.
Una vez que el café estuvo listo tome dos tazas de la alacena y acomode todo sobre la mesa. Busque el tarro con azúcar y continúe con la misma rutina de llevarlo a la mesa. Para cuando estaba sirviéndome un poco de café en la taza mis nervios habían aumentado. El autocontrol había desaparecido para ser remplazado por la desesperación de hacerle la pregunta que rodeaba por mi cabeza desde la pelea con Louis.
-¿Qué pasa entre Louis y vos?- Solté al fin y las palabras fueron tan atropelladas que dude que Matt hubiera entendido algo.
-¿Qué?
Suspire, si quería respuestas debía formular mis preguntas con más lentitud y de forma relajada.
-Cada vez que se encuentran, Louis y vos, actúan raro-Lo volví a intentar pero esta vez más pausado- Quería saber  por qué y espero que me lo digas porque Louis solo dice que no….- Me detuve, estaba comenzando a acelerarme de nuevo.
-Está bien, ya lo entendí- Me tranquilizó.
Bebí de mi taza de café esperando una respuesta.
Después de mi ‘desacuerdo’ con Louis la tarde anterior había ido a casa de Matt, pero tan pronto como puse un pie dentro Pam y la abuela llegaron, por lo que no tuve tiempo de conversar con él.
Esa noche me las arreglé como pude para evitar las molestas preguntas de Pam acerca de mi ‘novio’, por suerte la abuela no intervino. En la mañana acompañamos a Pam a tomar el tren de vuelta a Oxford, antes de que la abuela me devolviera a casa para salir con sus amigas.
Dado que no me apetecía estar sola fui en busca de mi vecino, quería aprovechar la oportunidad para limpiar mis interrogantes.
-¿Qué es exactamente lo que Louis te conto sobre mí? – Inquirió arrancándome de mis pensamientos.
-Bueno dijo que trabajabas en la recepción de su edificio y…-
-¿Y qué?- Se impaciento.
-Y sospecha que vos sos él que nos delato ayer.
No hablo. Se quedó mirando pensativo la mesa con el ceño fruncido, parecía estar muy enojado ¿o preocupado?
-¿Es…  es cierto?- La voz me templo al hablar.
Matt me miro sorprendido- ¿Vos crees que yo soy capaz de hacer una cosa así?-
-No, no sé, es que además de la abuela y Pam vos eras el único que sabía a dónde íbamos- Medite.
-¿Y no se te ocurrió pensar que tal vez Louis le conto a alguien más donde iba? A lo mejor a algún guardia- Remato.
-Sí, tenes razón.
-¡Claro que la tengo!- El tono de voz de mi amigo iba en ascenso.
-¿Entonces vos no fuiste?- Inquirí.
-¡No!- Exclamo- Tengo cosas más importantes que hacer que molestar a una celebridad estúpida.
Enmudecí mientras el rubio seguía despotricando en contra de Louis.
-¿No te das cuenta Fiona que todo esto lo hace porque esta celoso y no quiere que seamos amigos?
-No sé puede ser…
-¡Es por eso! Él y todos los demás, piensan que por ser famosos pueden manejar a las personas a su antojo- Dijo haciendo comillas con las manos en las últimas palabras- Idiotas.
Las palabras de Matt salían de su boca con cólera e ira.
-Está bien Matt, perdóname por desconfiar de vos- Me disculpe.
-No importa – Intentó suavizar su tono de voz pero todavía se podía percibir la ira.
-Igual no creo que sean las típicos famosos arrogantes, ayer Louis fue muy cordial y amistoso con las fans que lo fueron a saludar- Lo defendí, podía creer que Matt no hubiera  sido el soplón pero Louis me había demostrado ser una muy buena persona.
Bufo rodeando los ojos- Fiona, Fiona, sos muy ingenua- Acaricio mi cabello pero me aleje- ¿No te das cuenta que es toda una pantalla para que confíes en él?
No respondí. El enojo de Matt se le estaba yendo de las manos por lo que decidí cambiar de tema.
-Ok, ya me quedo claro, vos no fuiste asunto resuelto.
-Bien.
-Bien.
-De todos modos se lo tenían merecido- Susurró por lo bajo.
….
-¡Silencio por favor!- Stefan, el chico de cabellos oscuros y ojos claros que había conocido cuando plantamos árboles en el parque, trato de calmar a la multitud que estaba compuesta por jóvenes pertenecientes al club de Greenpeace del cual me había hecho miembro gracias a Emma.
Esta era mi primera reunión como miembro oficial. Pensar que casi se me olvidaba por estar con Louis. El encuentro era  en Hyde Park, el parque al que ya me había acostumbrado a frecuentar desde mi llegada a Londres.
Luke merodeaba por el lugar olfateando las flores y molestando a las palomas que volaban despavoridas cuando el corría hacia ellas. Había decidido traerlo porque no pude resistirme a su mirada de pobrecito cuando me vio dejar la casa con mi remera del club.
-Estamos reunidos para discutir cual va a ser la próxima intervención que haremos- Stefan empezó a hablar cuando todos se callaron-¿Alguien tiene alguna idea?
Emma, que se encontraba sentada en el pasto junto a mí, levantó la mano.
-Emma- La invitó a continuar.
-Podríamos ir a las escuelas para juntar firmas para salvar el Ártico- Sugirió.
Murmullos de aceptación invadieron el silencio.
-Buena idea, ¿alguna otra?
La reunión duró varias horas, las cuales se pasaron volando, debatimos por un largo rato hasta que el sol comenzó a bajar y Stefan dio por concluido el encuentro.
Emma quiso acompañarme a casa ya que estaba empeñada en charlar más a fondo con la abuela Lynn, de quien, según ella aseguraba, Louis nunca dejaba de hablar, además de mí. Su última afirmación me puso algo incomoda y más aún al recordar mis últimas horas con él.
-No creo que quiera hablar mucho de mi ahora- Me lamente. Siendo sincera, lo extrañaba.
-¿Cómo va tu relación con Louis?- Indago Emma golpeándome anisadamente con su hombro.
-¿Cuál relación?- Trate de zafarme del tema.
Emma puso los ojos en blanco-Fiona no te hagas la tonta-
Suspire. No había alternativas, si no confiaba en Emma ¿En quién más lo haría? ¿En la abuela?
-Mal- Admití.
-¿Qué? ¿Por qué?-
-Anoche tuvimos una pequeña pelea-
-Eso es normal Fiona, todas las parejas tiene peleas y más si esta Louis de por medio- Me animo.
-Es que no somos pareja, ese es el problema.
-Sí, claro- Respondió sarcástica - ¿Y por qué pelearon?
-Bueno… es complicado, el no quería que me quedara en casa de Matt porque sospechaba de que él fue el que nos delato en el Yorkshire tea- Dije con un hilo de voz.
Emma se llevó la mano a la cabeza y bufo.
-Y tenía que estar metido el burro en este asunto- Exclamo para sí misma y luego se calló porque habíamos llegado a casa y la abuela Lynn se encaminaba hacia nosotras para darle la bienvenida a mi nueva amiga.
Después de los saludos  la abuela prometió llevarnos dos vasos de jugo a la habitación. Ya a solas me puse a interrogar a Emma, esta vez me tocaba a mí.
-¿Por qué todos están en contra de Matt? ¿Qué les hizo?- Hable ya cansada de todo el asunto.
-Qué no nos hizo querrás decir- Emma suspiro y se acomodó mejor en mi cama- Mira Fiona yo sé que para vos Matt es una buena persona y un amigo confiable pero no es así y yo puedo demostrártelo.
Escuche el relato de Emma con mucha atención, sin interrumpirla más que para hacerle preguntas puntuales y cuando la abuela Lynn trajo los vasos de jugo. Al finalizar estaba sorprendida y aún más confundida.
-¿O sea que Matt me mintió?
Emma asintió y pude notar la lastima en sus ojos- Al igual que a mí.
Esa noche me costó más que nunca conciliar el sueño. Todos los sucesos de los últimos días merodeaban por mi cabeza impidiendo que mi cerebro desconectara. Matt, Louis, Emma y los malditos paparazis. ¿A quién se supone que debía creerle? No es como si tuviera una relación de años con ninguno.
Finalmente logré dormirme, aunque fue un sueño intranquilo. Al despertar estaba tan contracturada que tuve que duplicar mis ejercicios matutinos para poder  relajarme. Efectivamente algo no estaba bien.
Ya vestida y después de un delicioso desayuno con la abuela Lynn me encaminé a casa de Matt para ponerle fin a todo este absurdo drama.
-Quiero la verdad y la quiero ahora – Dije mientras me interponía entre él y su recién lavado automóvil.
Matt bufó - ¿Y ahora de qué estás hablando?-
Puse los ojos en blanco – Ya sabes…. –
-No puedo creer que sigas con eso, ¿qué fue lo que te dijo Emma?-
-No importa lo que ella me dijo – Me detuve al comprender mejor su comentario anterior - ¿Cómo sabías que hable con Emma?-
El cuerpo del chico se tensó. Sus ojos desviaron y su voz parecía insegura – Las vi entrar a tu casa ayer por la tarde –
-Me estabas espiando – Lo acusé.
-Es un país libre – Se defendió – Sos mi vecina Fiona, es normal que sepa ese tipo de cosas –
Me limpié la cara con las palmas de las manos. Tenía razón, era mi vecino, tenía completo acceso a mis horarios. Con quién salía, cuándo y dónde, todo lo que tenía que hacer era sentarse en la entrada de su casa y observar.  – No es la primera vez que estás al tanto de mis horarios, ¿verdad?-
-No – Admitió ladeando la cabeza.
-Sabías de mi cita con Louis, la primera, en Pizza Hut – Mis pensamientos se expresaron en voz alta sin que yo pudiera controlarlos, estaba atando los cabos sueltos de todo este lío.
-Fiona- Empezó a decir pero lo interrumpí.
Escudriñé al rubio con la mirada. Llevaba unos jeans gastados, una remera estampada que parecía nueva y unas converse blancas. Era martes en la mañana, se suponía que debía estar trabajando - ¿Dónde está tu uniforme? –
Matt empezó a jugar con sus manos nerviosamente – Voy a saltearme el  trabajo por hoy –
-Estás faltando bastante últimamente, ¿cierto? –
-Sí, ¿qué es esto? , ¿Un interrogatorio? – Espetó a la defensiva - ¿Qué hay de malo con ganar un poco de dinero extra? –
Me le quedé mirando perpleja – Fuiste vos –
-No es tan malo como parece – Intentó justificarse – De todas formas nadie salió herido, y ¡por favor!, son famosos, le deben su vida a la prensa-
-¡Son personas Matt! – Grité enfurecida – Que sean famosos no te da derecho a hacer lo que hiciste- Intenté calmarme. Estaba enojada, más que con él, conmigo misma, por haberle fallado a Louis de esa manera.
-¡Fiona!- Oí al chico llamándome mientras me alejaba de su casa - ¿Qué vas a hacer ahora?-

-Arreglar el lío en que me metí por tu culpa – Respondí con rabia.

3 comentarios:

  1. CAPITULOOOO NUEVOOO!!!
    osea que al final Matt no era quien decía ser.... ES UN PAPARAZZI!! Pobre Fiona no se enteraba :(
    espeero que en el próximo cap lo arreglen todo ella y Louis, seremos felices las lectoras jajaja
    Love <3

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  2. me ha encantado tu noveee siguelaa bufff.. que odioso Matt no agunto a esas personas
    Nuevaa Lectoraaa
    Besoos

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  3. OMG OMG OMG soy nueva lectora y estoy I-M-P-R-E-S-I-O-N-A-D-A Me encantaaaaa pffffff ojala que se arregle toooodo con Louu

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